Una verdadera Mujer Fierrera
El mundo de los motores no es solo cosa de hombres y por mucho que les pese a los machistas
empedernidos, las mujeres se han abierto paso hacia el camino de los fierros
con tanta tenacidad que hoy en día nada tienen que envidiar a sus contrapartes
masculinas.
Pero la tradición ha sido bastante
injusta con las “fierreras” ya que el automovilismo era
considerado históricamente como "poco femenino" y poseía una imagen
de deporte masculino muy arraigada, por lo que la presencia de mujeres como
pilotos, integrantes de equipos y dirigentes era mucho menor a la de varones.
Que los deportes de motor se hayan considerado específicamente para hombres
tiene varias explicaciones. Una de ellas es que construir y operar vehículos
fue en sus inicios una tarea sucia, y por tanto
mal vista para las mujeres. También los padres de familia preferían
dedicar su dinero a sus hijos varones, sumado a que el deporte es muy riesgoso
e intentaban evitar que sus hijas pusieran su vida en peligro.
Pero afortunadamente esto ha quedado en el pasado y el papel de la mujer en
el automovilismo dejo de ser relegado a una labor de imagen, como azafatas o
pitbaby. Y esto es debido a pioneras como
la británica Dorothy Levitt, la primera piloto en ganar una competencia
automovilística en 1903 y quien ostentó récords mundiales de conducción y
velocidad para mujeres, ganando varias competiciones de automovilismo y
motonáutica.
Aun así para
algunos hombres, ser superados por una mujer sigue siendo una deshonra, por lo
“ellas” pueden recibir manifestaciones de desprecio y mofa en todo tipo de
pistas. Sin embargo nada puede detener la pasión de éste movimiento femenino
que no para de crecer y que alcanza nuevas partidarias constantemente.
Y un claro ejemplo de esta nueva
era de “Mujeres Fierreras” llega de la mano de Ileana Rulli y sus 27.000
seguidoras en su página de Facebook. Un lugar donde ellas se encuentran para
hablar, compartir experiencias, fotos e información de su pasión más grande: Los fierros.
“La pagina la cree debido a que no había
ninguna que nos identifique. En ese
entonces si buscabas una que sea para
mujeres que amen los fierros no existía.
Entonces fue en abril del año pasado que salió Mujeres Fierreras y la verdad es
que sumo tantos seguidores que no lo podía creer. Una locura”, afirma Ileana todavía sorprendida por el éxito
rotundo que logro éste proyecto.
Esta joven de 23 años había notado
su interés por los autos desde su niñez ya que su familia siempre estuvo ligada
al tema. Pero no fue hasta el año 2010 que ella comprendió que éste sería su
estilo de vida. “Mi llegada a éste nuevo
mundo fue debido a mi novio, quiso armar
un casco para la clase 9 del Gálvez y yo empecé a ir a talleres, conociendo
personas y de a poco iba metiéndome en lo que eran los autos, aprendiendo los
nombres de las partes. Lo ayudaba a él todos los viernes en el autódromo ya sea
calibrando las gomas, preparando la mezcla para el momento de la tirada y demás",
declara entre risas recordando los que
serian sus primeros pasos hacia su pasión.
También recuerda su llegada al
autódromo de Oscar y Juan Gálvez donde notó, bastante decepcionada, la falta de concurrencia femenina. Y si bien
ella no quiere adjudicarse todos los logros, después de la creación de su
página esa situación se revirtió en gran parte.
“Con la pagina conocí chicas que querían
comenzar a correr y por suerte se animaron. Aman lo que hacen y de hecho ahora
somos un par las que vamos a correr. Es genial tener amigas que tengan la misma
locura que una misma, ya que de hecho es muy difícil encontrarlas”, confiesa.
Ahora el Gálvez pasó a ser su salida de todos los
viernes y domingo, así como los encuentros de autos en los que participa con
sus compañeras. Esta es la manera en la que
se sienten vivas, es una pasión que Ileana trata de explicar: “Cuando
estoy arriba de un auto corriendo en
esos 402 metros, es una adrenalina pura que no te la da nada ni nadie. Se te
llena el alma, es una sensación única. Tenes
que estar ahí arriba para poder sentirlo, porque no es algo que se pueda contar
a la ligera”.
Es muy importante para ella y las demás
diferenciarse de las típicas “butaqueras” que afirman ser fanáticas de los
autos pero en realidad solo gustan de pasear en ellos. Ya que para las
verdaderas fierreras, esta clase de mujeres son las responsables de encasillar
a todas en el estereotipo ya implantado por la cultura machista.
Ileana asegura que para esta pasión
no existe género, seas hombre o mujer si lo sentís es lo único que importa. Y se
alegra que de a poco se vayan rompiendo las barreras, porque según sus propias
palabras ser mujer no impide nada y
asegura: “Incluso te da el empujón de hacer lo que te gusta y el plus de
hacerlo bien y cerrarle la boca a la gente que te dice que no. Nosotras tomamos
esto enserio y somos varias las que incluso nos interesamos por la mecánica en
general.”
Rulli comenzará a estudiar mecánica
el año que viene ya que hasta el momento todos sus conocimientos provienen de
observar a otros y buscar información en internet y tomar apuntes durante horas
para poder llevar lo que aprende a la
práctica. No es poco su merito, pero para ella es necesario desarrollar cada
vez mas actitudes para ser la mejor en la pista.
“Lo importante es escuchar y prestar atención. ¡Meter mano
donde te dejan! Tenes que ir absorbiendo todo como una esponja, si es lo que
realmente te gusta. Y al principio te da
un poco de miedo de hacer cagada, pero una vez que estas ahí le das para
adelante “, opina completamente convencida.
En marzo de éste año compró al que
ella llama “su bebe”, un Fiat Uno SCR
modelo ’95, con el que comenzó a correr en abril y del que se encarga por
completo. Resuelve todos sus problemas con la ayuda de un mecánico amigo y
hasta se encargo de colocarle
múltiple y escape de punta a punta.
“¿Sabes que es lo lindo? que vas mejorando,
vas conociendo el auto. Te das cuenta donde pasar el cambio y donde no, como
sacarlo y demás. No podes decir que amas esto si no conoces como funciona. Es
lo básico”, sentencia Ileana.
Las mujeres fierreras quieren poner fin a los estereotipos y
derribar la imagen que aún se conserva en el inconsciente colectivo, que parece
relegarlas a ser un mero objeto de calzas ajustadas y escotes prominentes que adornan las pistas. Porque ellas no temen engrasarse la
ropa o romperse las uñas por sus autos y están dispuestas a pisar el acelerador
a fondo hasta lograr ser reconocidas.
Por Noelia Velazquez

Muchas gracias por la nota nena, quedo muy buena! Gracias por este espacio y darme el lugar para expresar el sentimiento que me genera esta pasión, somos muchas las que amamos los fierros!
ResponderBorrarSer fierrera no te hace menos mujer te hace unica entre tantas ♥